Egresados

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En este espacio encontrarás oportunidades de desarrollo, así como medios de enlace y servicio con su alma mater. Es por ello que encontrarás información de programas de actualización profesionales, bolsa de trabajo, actualización de datos entre otros servicios. Además, te ofrecemos la credencial digital de egresado Culmen.

• Jóvenes con excelente nivel de conocimientos, con pensamiento crítico y capaces de solucionar problemas.
• Líderes católicos, con profunda fe, que oran, viven los sacramentos y juzgan con rectitud.
• Hombres honestos y congruentes, con una vida equilibrada entre estudio, deporte, apostolado y vida social.
• Jóvenes de carácter, que se conocen a sí mismos, conscientes de sus talentos y de sus debilidades; con voluntad firme, tenaces en la lucha, fuertes de espíritu ante el sufrimiento y las dificultades.
• Personas que han desarrollado como habilidades para la vida la empatía, la esperanza con esfuerzo, la libertad con responsabilidad y la perseverancia.
• Jóvenes que identifican sus aptitudes, pero al mismo tiempo mantienen una conciencia humilde, viviendo un liderazgo de servicio, generosos con su tiempo y con sus talentos.
• Con buen manejo de las relaciones interpersonales, que colaboran y suman en el trabajo en equipo, con muy buena capacidad de comunicación verbal y escrita.
• Comprometidos en acciones apostólicas que lleven a la transformación positiva de la sociedad.

Ganar un premio que involucra ser elegido por tus compañeros, directivos, formadores y maestros como la persona que mejor representa lo que es ser un alumno de la Academia Culmen es todo un honor y una responsabilidad.

Cuando me preguntan, ¿cómo me hice acreedor de tan prestigioso honor? Yo respondo con toda franqueza que a ciencia cierta no lo sé, pues jamás busqué ganar dicho reconocimiento de manera consciente y la razón de esto es que mi padres siempre me dijeron que fuera yo mismo y diera lo mejor de mí, que mostrara alegría en todo lo que emprendiera, ofreciera ayuda y apoyo a todos por igual y que defendiera las causas que considerara justas siempre. Hice caso al consejo de mis padres y el día de la graduación al escuchar la nominación mi corazón se aceleró y corrió como caballo desbocado cuando escuché mi nombre como el ganador.

Después de la fiesta y las felicitaciones el pensamiento de “cómo lo había ganado” invadió mi mente y luego de pensarlo unos días, me di cuenta del gran cambio que había tenido durante mi estancia en la Academia. Esta reflexión me llevó a recordar grandes momentos y los aprendizajes que adquirí en la aventura que significó estar en mi querido colegio:

Tener la madurez de aceptar mis errores y trabajar para corregirlos.

Aceptar y reconocer que hay personas que son mejores en unas cosas pero que también tu puedes ser el mejor en otras.

Estar siempre dispuesto a tender la mano al que lo necesita.

Hacer más de lo que los demás esperan de ti, pero ojo, no por demostrarle a los demás de lo que eres capaz sino por mostrarte a ti mismo lo que puedes hacer.

Nada en este mundo se puede hacer solo y sin ayuda, aprende a escuchar los consejos de otras personas.

No finjas ser una persona que no eres, las mentiras son difíciles de mantener.

Es sabio decirle a una persona “no” cuando ese “no” le hace un mayor bien.

Aprende a reconocer tus debilidades, pero también tus fortalezas.

Y lo más importante SÉ TÚ MISMO.

Estos aprendizajes me hicieron llegar a la conclusión de lo que significa ser un alumno galardonado con el Culmen Honoris, el cual definiría como: “el que siempre busca llegar a la cima del éxito sin permitirse pisotear a alguien más, el que crece ayudando a que sus compañeros sean mejores y que éstos le ayuden a ser mejor, el que se valora como persona y sabe de lo que es capaz, el que acepta las críticas de una manera constructiva y pone manos a la obra para corregir esos errores, el que acepta los consejos de personas más sabias que él, el que no finge ser una

persona que no es y sobre todo el que sabe que nunca llegará a ningún lado solo y sin ayuda.”

A pesar de que yo haya sido galardonado con dicho premio, creo firmemente que las características previamente mencionadas son propias de todos mis compañeros graduados y de todo alumno que pertenece a la Academia Culmen, por lo que puedo decir que todos somos un Culmen Honoris.

Por Jesús Elías García Ruiz, Premio Culmen Honoris 3° Generación.